Temperatura infernal
Por Alejandro de la
Torre
Gómez y casi mil empleos
perdidos
Cd. Obregón, Sonora.- Mientras
subimos a 48 grados centígrados de temperatura infernal en la calle, se dan
harto paquete declarando dentro de sus oficinas los funcionarios del gobierno a
la ventisca de un frío minisplit.
Por
un lado aduce el titular de economía estatal Moisés Gómez que se perdieron a
causa del bloqueo a la carretera 974 empleos en el sur de Sonora, augurando un
negro panorama de seguir así. Pero inmediatamente fue contrariado por el
titular de economía municipal Carlos Lares que dijo que no era cierto que la
protesta haya influido en detrimento económico para la región.
Pero
evidentemente fuera de los dos comentarios de los encargados de la promoción
económica, el desempleo es lacerante no de ahora si no que se arrastra desde
las últimas tres décadas en Cajeme y en Sonora.
Podemos
hablar sin temor al error, que 5 de cada 10 personas económicamente activas no
cuentan con percepciones salariales y se encuentran en las garras de la pobreza
8 de cada 10, con ingresos inferiores a los dos salarios mínimos diarios, porque
además de que los obreros ganan salarios pírricos la mayoría de la gente se
dedica a las actividades informales, o sea tiangueros, cambaceo, cundinas, servicio
domestico, limosneros y hasta narcomenudistas.
Estamos
hablando de 80 mil empleados en Cajeme cuando la población en edad de trabajar
es de alrededor 400 mil habitantes.
De
esta manera 320 mil personas mayores de 18 años de edad no cuentan con un
empleo fijo.
Eso
de que en Cajeme hay 10 mil pobres según el titular de desarrollo social
municipal Emeterio Ochoa mueve a risa ¿No será al revés que hay tan solo 10 mil
ricos? y todos los demás mal comemos, mal vestimos, mal vivimos…
Chepo y no chepo nada
El
Chepo fue ratificado. Como director de la selección mexicana de futbol, les
ganó a unos equipos de unas islitas del caribe llamados Martinica y Trinidad y
Tobago con todos los demás perdió o empató. Y perdió con Panamá dos veces, un
país con 60 veces menos población y con solo 10 años jugando profesionalmente.
Aquí
hay una similitud simbológica de la selección nacional manejada por el Chepo De
la Torre, en riesgo de quedarse fuera de la copa del mundo con el país manejado
por el “no chepo nada” Peña, en riesgo de quedarse fuera del desarrollo de
otros países del mundo.
Ya
que Peña Nieto parecería gobernar el séptimo año del sexenio de Calderón: Bajo
crecimiento, inestabilidad monetaria, mayor pobreza, mayor cantidad de muertos,
cero goles.
Ante
un impresivo arranque mediatico, el gobierno de Peña Nieto se ha frenado en los
últimos cuatro meses de forma dramática, una muestra de ello es el desdén con
el que se atiende la protesta antiacueducto de El Novillo. Pero igual se puede
ver que el actual sexenio ha entrado a una etapa de parálisis “pactista” donde
no se tiene ningún avance ni en reformas, ni en cambios a la seguridad, ni en
crecimiento económico, al contrario la dosis neoliberal se profundizará: más impuestos
incluido a los alimentos y medicamentos, incremento a los combustibles,
encubrimiento a los privilegios, favoritismo a los poderes facticos, ineficiencia,
corrupción.
Y
son tan endebles las propuestas sobre reforma política tanto del PAN como del
PRI, que buscan evadir una Reforma de Estado y al no darse, se perturbarán y
aplazarán indefinidamente la reforma al sistema fiscal y hacendario y la reforma
a la conducción del petróleo y derivados.
Eso
de la segunda vuelta electoral y de la reelección de legisladores son una burla
para el buen juicio político. Eso de cambiar al IFE y lo de las candidaturas
independientes, son minucias ante el Imperio de los poderes fácticos que han
controlado al sistema electoral mexicano desde el fraude de 1988 y el asesinato
de Colosio en 1994. Se han impuesto con este sistema manipulador y fraudulento,
con una decorada de votos confusos, a cinco presidentes de la República: de
Salinas a Peña Nieto.
Este
sistema de inducción tecnológico y mediático del voto, adicionado con el
control económico sobre la población sobre su empleo y los subsidios públicos y
la entrega de dadivas y regalos días antes o el mismo día de la votación a la
gente pobre, no es un sistema democrático, si no un sistema simulado “ad hoc”
para favorecer y reproducir intereses trasnacionales y de la oligarquía financiera
que explota a la clase trabajadora y oprime en la pobreza al pueblo.
Se
requiere una Reforma de Estado que transforme al aparato público federal para
hacerlo eficiente y honesto, que haga del poder legislativo una representación
del poder popular, que reestructure el sistema judicial y a los tribunales de
justicia para que hagan expedita y pronta igualdad a todos los ciudadanos ante
la ley, que haga girar los pies que están de cabeza en la repartición de la
riqueza nacional y del presupuesto público, dándole fortaleza cabal a los
municipios con gobiernos formados y conducidos por los ciudadanos comunes.
En
cuatro palabras –Reforma de Estado completa– que evitaría una revolución
socialista.
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