Un
presupuesto para 2020, de gasto de Mariscal que muestra la traición
Por Alejandro de la Torre D. / CRóNICA10
La gran
carencia del grupo de burocratitas que se autocatalogan de izquierda,
encabezados por Mariscal, seguidos por el Chorro, el Leonel, el Piui Grijalva,
Mungarro, Ozorio, es su tolerancia al otro grupo de burocratitas borregos y que
laboraron con Mariscal en Itesca, la tesorera Montaño y su marido secretario
técnico Delgado, Valladares, Félix León, Anguiano, Omar García, y otros incondicionales
como la Brianda, López Meza, Galindo, Ovidio, Murguía, etc, sumados a los
negociados con los lamarquistas y prianistas, Tocho, Patiño, Serna, Guerra,
González, Camargo, Armenia, Sanchez Patiño, Contreras, Armenta (2), Benítez,
Cano Castro.
Esta flojera de los presuntos surgidos de "la izquierda"
es la peor porquería en convicciones y solo muestra su arribismo y oportunismo
para ocupar un puesto bien pagado, no merecen el menor respeto político, y
merecen ser denunciados de todo, menos ser considerados -de izquierda-.
Y es
que el gobierno de Mariscal es una traición no solo al esquema tan traído y
llevado de una supuesta 4T, si no es una traición al pueblo de Cajeme, a su
antecedente de lucha y a su escencia social. Mariscal pacta con los intereses
creados y los "izquierdistas" traicionan su conciencia si es que
alguna vez la tuvieron.
Ninguno de todos los mencionados tiene antecedentes de
trabajo político en Morena, son un batidero de intereses personales y
rastreros, ni siquiera el despedido Fausto Flores y su hermana Julissa, o
Rodrigo González y López Varela también bajados de la nave mariscalista.
El
gobierno de Mariscal pudo concertar con empresarios, con caciquillos, con gente
de poder económico, con cetemistas y priístas, con poderes fácticos del
municipio, pero no debió nunca subordinarse a Díaz Brown para quedar bien con
Pavlovich y Beltrones o encubrir a Faustino Félix, eso no lo perdonará el
pueblo.
Y esa es la causa de que no sea un gobierno popular, que la gente del
pueblo no sea incluída en las decisiones gubernamentales mariscalistas y que
los 2 mil millones de pesos de recursos a gastar sean conducidos con los mismos
esquemas presupuestales de los gobiernos del PRI y del PAN que han gobernado
Cajeme en los últimos 20 años.
Un presupuesto de 400 millones de gasto en obra
y servicios manipulado y favorecedor de los mismos grupos beneficiarios, un
presupuesto de 400 millones de pesos en Oomapasc que protegen el mismo esquema
corrupto y de saqueo, un presupuesto de 240 millones en seguridad pública que
casi es tirado a la basura por la ineficiencia general y por un sector corrupto
de la policía municipal cómplice de grupos del tráfico y la delincuencia.
Un
presupuesto de 800 millones de gasto de servicios personales y gasto corriente
que protegen la ineficiencia del aparato burocrático, robo de dinero público,
derroche en mantenimiento de edificios, gasolina, sueldos de 80 altos
funcionarios, regidores huevones, y discrecionalidad en decenas de millones de
pesos para gastarlos en los despachos del alcalde y de sus secretarios.
Este
ayuntamiento es la continuación de los ayuntamientos priístas de Faustino y
Díaz Brown, y de Barro, Villanueva y Chuy Félix. De sus esquemas corruptos y de
privilegiar a familiares, compadres, aliados partidarios, grupos corruptos de
presión política, a moches y chayotes, a empresarios vividores de contratos y
proveedurías.
Mariscal es un corrupto más, que no solo ganará 2.5 millones de
pesos de sueldo, sino 13 millones más de gasto a discresión que tiene en presidencia,
de los sobornos y los regalos sin pedirlos, así como pactos y negociaciones con
los poderes fácticos. Todo a oscuras, todo a espaldas de los ojos, todo bajo
cuerda, un gran comportamiento dehonesto y traidor, que todos los alcades han
tenido y gozado, con historias incontables y bochornosas para la dignidad.
Mariscal no es la excepción, por que su primer comportamiento fue aislarse,
sonreir hipócritamente y decir tantas pendejadas para desviar la atención así
como corromper con dinero a medios y seudo periodistas.
Marsical es tan
corrupto como los prianistas, no hay cambio. Y si alguna vez aparenta ayudar a
los pobres, lo hará con recursos ya existentes u obtenidos por la beneficiencia
o el dinero federal, no por sus buenos oficios, que no los tiene. La solución a
la mentira, traición y deshonestidad mariscalista y de sus achichincles es la
apelación al criterio y al enjuciamiento popular.
El presupuesto que se
aprobará este sabado 28 de diciembre (día de los tontos inocentes) de 2019 a
las 13 horas en sesión pública de cabildo pero ya aprobado en la Comisión de
Hacienda, con 13 regidores a favor, y en contra el Regidor Arrayales.
Pudo
haberse restructurado para reconducirlo a la eficiencia y capacidad de
respuesta a la ciudadanía, pudo haberse reducido el gasto común en 100 millones
de pesos para hacer obra prioritaria y reintegrar funciones en servicios
públicos y pudo haberse recortado en otros 100 millones para ayudar a 10 mil
cajemenses en pobreza alimenticia, de salud y marginación.
Pero no, los sueldos
se los incrementarán, y los gastos superfluos seguirán igual, asi como la
ineficiencia y la inseguridad.
