domingo, 8 de junio de 2025

Abejas moribundas en Sonora

 Célida se la da de agricultora

La muerte de las abejas

Es rubia, el cabello suelto, da más luz al ojo moro, voy desde entonces envuelto en un torbellino de oro. La abeja estival que zumba, más ágil por la flor nueva, no dice como antes tumba, Eva dice, todo es Eva.

José Martí

 

Por Alejandro de la Torre D.

Ahí se pusieron en un foro a llorar los que ya no producen miel por que se esperan en total unas 15 mil colmenas y 150 toneladas este año, cuando existían mas de 60 mil y se obtenían hasta 600 toneladas el año 2020, y puede ser casi el fin.

Fueron decenas de personas a escuchar la demagogia de Célida López, al auditorio ganadero que el gober precioso remodeló con algunos millones de pesos de dinero público estatal.

Los asistentes dicen que son apicultores, pero se quejan de que no llueve, sin embargo la actividad viene en picada llueva o no llueva, no por la falta de lluvia, si no por la destrucción ambiental.

La actividad se ha derrumbado y creen que Célida y Durazo les van a dar migajas como los mil 200 pesos que entregaron por hectárea de rastreo ante la sequía a los acaparadores de tierra agrícola para una quinta parte de la superficie que se quedó y se quedará sin sembrar si las nubes no se compadecen del río Yaqui.

El enfoque es abrupto y lucrador, la preocupación es que no se exporta miel, pero no advierten que las abejas no mueren por la falta de agua si no por la destrucción de la vegetación, del subsuelo húmedo y por el uso de químicos que se han acabado la microfauna.

La trascendencia de las anthophilas no radica en que producen fructuosa y luego se embotella y se le echa a los jotqueics, su papel de fondo es la vida, ya que uno de cada tres alimentos que salen de la tierra son polinizados por las abejas, esto es que sin abejas, no florecieran todas las fito especies; sin abejas se muriera la tercera parte de la producción mundial de alimentos.

¿Qué es una Abeja?

Como el poema de Martí “La abeja estival que zumba, no dice como antes tumba, Eva dice, todo es Eva”. La destrucción climática y por lo tanto del agua y del suelo, son los efectos de la depredación y la sobrexplotación sin prever su conservación y protección; es el resultado de la expoliación de los recursos naturales sin regenerarlos. Las abejas más que insectos recaudadores de miel, son las creadoras de la fecundación de la naturaleza, son “un torbellino de oro”, riqueza irremplazable del planeta.

Una abeja es una antofila es un vocablo de origen griego, Antho: Flor, Phila: Amor. El polen está constituido por fructuosa y cada Apis recarga su abdomen trasero con ventrículos llenos de polen y néctar de las flores que los depositan en el enjambre y se purifican generando la miel.

La apis es de la rama invertebrada la mas increíblemente sensible a los cambios de la vida silvestre, por extraño que parezca al tocar con sus manazas cualquier materia, la reconoce posteriormente solo con sus antenas y vuelve al lugar que tocó, de esta cualidad es la causa de por qué solo extraen polen de determinadas flores no de flores distintas, y el polen de ese tipo de flor es la que todas las obreras depositan en el enjambre. Esta característica es única y al mismo tiempo son tan frágiles como las mariposas de colores e incluso sufren del fenómeno de la metamorfosis.

La existencia de las abejas es como un termómetro del estado en que se encuentra la contaminación, el deterioro ambiental, la destrucción del ecosistema.

La procreación de las abejas debe convertirse en una decisión de la defensa de la naturaleza ante esta fragilidad apiaria. No es tan solo un insecto, es la sanidad del medio, es la capacidad de sobrevivencia, es la medida de que la vida natural se encuentra marchando. Al no haber abejas, es un sintoma grave de deterioro del entorno, un foco rojo, no solo por que no se produce miel para los que lucran con el mesquite y lo hacen carbón, la baja población del Lapacho, el deterioro de los acuiferos para el guacaporo, las campanillas amarillas perjudicadas por los canales de concreto, la salvia o el cinco negritos golpeados por la resequedad explotadora de los riegos extensivos. Las abejas no polinizarán mas y las plantas no darán frutos, no enterraran raíces alimenticias, no habrá mas legumbres ese es el riesgo, también para los animales de pastoreo y engorda, la inexistencia de polinización.

Pero que Durazo y Célida sigan con su discurso mentiroso de que la producción de miel apícola será fomentada, cuando ya cumplirán cuatro años y las actividades rurales productivas están peor que nunca.



HERMOSILLO, SONORA.- Desde hace tres años, la producción de miel en Sonora ha bajado de forma drástica en los apiarios, informó José Alfonso Yescas Nieto, encargado de Apícola Yescas.

El apicultor indicó que debido a las condiciones climáticas, no hubo florecimiento de plantas y eso a su vez hizo que las abejas no tuvieran cómo trabajar. La extracción de miel, mencionó, se da dos veces al año en diferentes temporadas, primeramente en la época, después de las lluvias de verano, y en septiembre, tras la temporada de tormentas tropicales.

En su apiario, Yescas Nieto señaló que la producción de miel en una temporada normal es de 200 litros, pero actualmente se recolectan solo 100 litros. Los apicultores coincidieron en que se requiere del apoyo gubernamental para evitar la extinción de esta especie.

 

EN CRISIS

José Manuel Pérez Marín, quien desde hace 30 años se ha dedicado a recolectar este producto y a trabajar en la preservación de estos insectos, aseguró que la existencia de las abejas se encuentra en momentos de crisis y es necesario cuidar de ellas.

“Tenemos una situación difícil con las abejas, tenemos carencias muy grandes los apicultores, cada día es más nuestro problema debido a la sequía: Este año no ha llovido y nuestras abejas están muriendo”, aseguró.

Según datos y experiencias de otros apicultores, Pérez Marín manifestó que la mayoría disminuyeron sus apiarios al casi 50%, debido a la dificultad de atender a las abejas en estas circunstancias, ya que con el calor, los panales se derriten y estos insectos mueren.

Los apicultores locales, expuso que no cuentan con apoyos gubernamentales, a pesar de que en países como Estados Unidos, el oficio del apicultor es considerado de alto riesgo y se les designan estímulos económicos para realizar esta actividad.

Exhortó a las personas a plantar árboles nativos que atraigan a las abejas, tales como el palo verde, mezquite, palo dulce, gatuño o el huizache.

Reconoce la titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Recursos Hidráulicos, Pesca y Acuacultura, Célida López Cárdenas, que la apicultura en Sonora enfrenta una profunda crisis y por ese motivo es fundamental el establecer que ayuden a revertir esa situación.

La funcionaria, manifestó ello dentro del Primer Foro Regional Apícola Sonora 2025 y reconoció que en el 2024 la producción de miel en Sonora cayó a 296 toneladas, apenas el 47% del volumen alcanzado en 2020, cuando se produjeron 566 toneladas.

“Esta caída también se refleja en el valor de la producción que en el 2024 fue de 14 millones de pesos frente a los más de 27 millones alcanzados en el 2020”, dijo.

Por último, mencionó que actualmente se estima que en Sonora existen entre 34 mil y 36 mil colmenas activas, una baja considerable en comparación con las 60 mil registradas en 2018, atribuida principalmente a la sequía y al abandono del sector.

 

Las colonias de abejas podrían sufrir pérdidas del 70% en 2025, lo que impactará la agricultura

La polinización por abejas es fundamental para la producción de alimentos, según el USDA.

Por Leah Sarnoff

Las colonias de abejas melíferas de todo Estados Unidos se enfrentan a pérdidas récord en 2025, y los científicos advierten que el impacto podría sentirse en la producción agrícola.

Los entomólogos de la Universidad Estatal de Washington anunciaron esta semana que se proyecta que las pérdidas de colonias comerciales de abejas alcancen entre el 60% y el 70% en 2025.

Durante la última década, las pérdidas anuales de colonias han oscilado entre el 40% y el 50%, lo que marca un salto significativo este año.

Priya Chakrabarti Basu, profesora adjunta de salud de polinizadores y apicultura en la WSU, dijo a ABC News que las pérdidas de abejas melíferas podrían deberse a deficiencias nutricionales, infestaciones de ácaros, enfermedades virales y posible exposición a pesticidas durante la temporada de polinización anterior.

"Sinceramente, creo que se trata de una combinación de múltiples factores estresantes, por lo que durante años mi laboratorio se ha centrado en comprender los impactos y las interacciones de estos factores estresantes en las abejas polinizadoras", dijo Basu, y agregó que los apicultores comerciales de Estados Unidos están bajo presión para mantener las colonias.

"Las demandas de polinización no han disminuido, por lo que los apicultores enfrentan una enorme presión para mantener el mismo número de colonias para satisfacer esas necesidades", dijo Basu.

La disminución de casi el 40% en la población de abejas melíferas el invierno pasado es "insostenible", dicen los expertos

La polinización es fundamental para la producción de alimentos, según el Departamento de Agricultura de Estados Unidos , y la agencia afirma que aproximadamente el 35% de los cultivos alimentarios del mundo dependen de los polinizadores animales para producirse.

Los cultivos que dependen de las abejas melíferas y otros polinizadores para su crecimiento incluyen frutas y verduras, como manzanas, fresas, pepinos y aguacates, pero también frutos secos, como almendras y nueces de macadamia, según el USDA. Otras plantas afectadas son el café, el cacao y la vainilla, según el USDA.

"No quiero ser alarmista, pero este nivel de pérdida nacional podría significar un aumento de quiebras entre los apicultores", dijo Brandon Hopkins, profesor de ecología de polinizadores en la WSU, en un comunicado de prensa que acompaña a la investigación.

Hopkins dijo que los efectos se sintieron más fuertes en la producción de almendras de California.

"La industria de la almendra solicita con frecuencia colonias fuertes", afirmó Hopkins en el comunicado.

"Pero este año, los productores están desesperados", añadió. "Cualquier producto con abejas vivas en una caja tiene mucha demanda porque la industria tiene escasez de oferta. No he oído hablar de eso desde los primeros días del colapso de las colonias, alrededor de 2008".

Estos alimentos podrían desaparecer si las poblaciones de polinizadores continúan disminuyendo

Algunos de los cultivos que más dependen de los polinizadores incluyen almendras, arándanos, peras, manzanas, cerezas, pimientos, pepinos y brócoli, dijo Mulica. Las abejas también extraen aceite de las semillas de otros cultivos, como el maíz y la soja, dijo Mulica. "Es un servicio increíble que las abejas y los apicultores brindan a la agricultura", dijo Mulica. Tanto los conservacionistas como los científicos que estudian la seguridad alimentaria están preocupados por cómo la tendencia a la baja de las poblaciones de abejas afectará el suministro de alimentos en el futuro, dijo McArt.

A corto plazo, los precios de los alimentos podrían aumentar si el número de abejas que polinizan los cultivos continúa muriendo. En el futuro, los cultivos podrían desaparecer para siempre, dicen los expertos. Las abejas melíferas tuvieron un valor de producción de casi 350 millones de dólares en 2023, según el USDA.

Para combatir pérdidas de colonias tan graves, los científicos de WSU están trabajando en métodos para el control generalizado del ácaro varroa, la concientización sobre las prácticas de manejo de colonias de abejas melíferas comerciales y nuevas investigaciones sobre la nutrición de las abejas con la esperanza de que los apicultores tengan mejor acceso a alimentos saludables para sus colonias, según el comunicado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario