lunes, 8 de diciembre de 2025

FISCALIA DE SONORA INCUMPLE DEBER LEGAL. DEBE JUDICIALIZAR ESTA RESPONSABILIDAD LA FGR

CORRUPTO DURAZO PEOR QUE EDUARDO BOURS.

CORRUPTO FISCAL

Esta es la porquería de gobierno que tenemos con Durazo. 23 muertos por culpa de unos empresarios que tenian un generador eléctrico que explotó incendiando una tienda llena de inflamables y la corrupta Fiscalía y el corrupto gobernador peores que en el incendio de la guardaría ABC con Bours y Murrieta en 2009, encunbriendo funcionarios y salvando a estos empresarios que deberían estar en prisión preventiva.

Waldo’s: dueños de la tienda siguen sin comparecer a un mes de la tragedia

A más de un mes del siniestro en Hermosillo, la Fiscalía estatal sólo ha citado a empleados y gerentes, mientras los socios fundadores aún no enfrentan responsabilidad alguna; en tanto, 68 tiendas de Waldo’s siguen cerradas.

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HERMOSILLO, Son. (Proceso).– La Fiscalía General de Justicia de Sonora no ha citado a los socios de conformación de la empresa operadora de la tienda Waldo’s que se incendió y cobró la vida de 24 personas el pasado 1 de noviembre, a causa del estallido de un transformador eléctrico instalado de forma irregular en el interior del establecimiento, en el centro de Hermosillo.

Gustavo Rómulo Salas Chávez, fiscal estatal, pronunció un largo mensaje a través de un video 30 días después del siniestro, donde lo más relevante que dijo fue que se detectaron documentación apócrifa, una enumeración redundante de múltiples diligencias y análisis inconclusos.


“Entre los hallazgos más relevantes hasta el momento, es que se ha identificado el uso de documentación apócrifa, así como de un documento en particular que fue utilizado para realizar trámites oficiales y cuyo contenido no coincide con la realidad”, dijo el fiscal.

Rómulo Salas declaró que ya fueron entregados diversos dictámenes periciales sobre la mecánica de los hechos, los cuales supuestamente establecen la causa del fuego que dejó además a 10 personas lesionadas.

Entre ellos se incluye un análisis cromatográfico al fluido del transformador, que fue realizado en un laboratorio del Estado de México y se integró al expediente de la investigación, a la cual se ha referido como un asunto de “secrecía”.

A la fecha, la FGJE sólo ha citado a declarar a gerentes, empleados y representantes legales mientras se empieza a acumular la presión social y sigue sin judicializar el caso o vincular a los dueños de Grupo Vizion Lerma, que controla el holding a cargo de Waldo’s Dolar Mart de MéxicSu equipo de comunicación tampoco logró confirmar fechas o cargos de las personas que fueron citadas y acudieron a declarar durante las últimas cuatro semanas, a pesar de que la misma autoridad insiste en comunicar que ha tomado declaración a altos ejecutivos de esta empresa.

domingo, 7 de diciembre de 2025

Peores que el PRI los del Moreprian en acarr

Acarreo y viejas prácticas priistas para llenar el zócalo en evento del Moreprian

Enboga Editor. diciembre 6, 2025

Lo que en principio se planteó como una celebración de aniversario, comenzó a adquirir matices incómodos para quienes hacen crítica política: denuncias de “acarreo” y la impresión de viejas prácticas de movilización masiva al estilo priista afloraron desde antes de que iniciaran los discursos.

Este sábado 6 de diciembre, el centro de la Ciudad de México —el emblemático Zócalo de la Ciudad de México— volvió a ser escenario de una concentración masiva convocada por la presidenta Claudia Sheinbaum para conmemorar siete años de la Cuarta Transformación (4T). Lo que en principio se planteó como una celebración de aniversario, comenzó a adquirir matices incómodos para quienes hacen crítica política: denuncias de “acarreo” y la impresión de viejas prácticas de movilización masiva al estilo priista afloraron desde antes de que iniciaran los discursos.

Desde las primeras horas de la madrugada ya habían reportes de contingentes entrando al Zócalo y caminando desde distintos puntos de la capital, y también provenientes de estados como Veracruz. Los accesos viales —Paseo de la Reforma, avenida Juárez— fueron cerrados, lo que facilitó la llegada coordinada de grupos. Aunque las imágenes mostraban una plaza abarrotada, quedó la duda acerca de la espontaneidad de la concentración: en redes sociales y en declaraciones públicas se denunció que muchos de los asistentes habían sido trasladados en autobuses, posiblemente con incentivos económicos o materiales a cambio de su presencia, a la vez que quedan sobre la mesa las dudas respecto al origen de esos financiamientos que se calculan millonarios para movilizar a tantas personas.

Críticos señalaron que el uso masivo de transporte pagado para acarrear gente recuerda las viejas prácticas del viejo partido hegemónico: mecanismos de movilización que en el pasado —y no hace tanto— se utilizaron para crear la ilusión de apoyo popular, sin reflejar necesariamente voluntad propia. En un salto temporal, lo que parecía superado —la manipulación de movilizaciones— reaparece como una sombra sobre la legitimidad del acto. También se ha cuestionado la falta de grupos como el “bloque negro” y grupos radicales que aparecen para reventar las manifestaciones de la oposición.

Por su parte, el gobierno y simpatizantes de Sheinbaum defendieron que se trata de ciudadanos que se organizan e incluso rentan transporte para acudir juntos, un argumento que la propia mandataria ya utilizó en el pasado tras cuestionamientos similares. Sin embargo, tal defensa no logra disipar la percepción sobre una movilización orquestada. El riesgo de legitimar un mecanismo de convocatoria masiva bajo formas cuestionables choca con la narrativa de transformación, renovación y ruptura con viejos vicios.

Lo ocurrido este 6 de diciembre en el Zócalo no es un acto aislado: marca un retorno simbólico de métodos de control social y político que partidos de antaño —y particularmente del viejo régimen priista— emplearon para su beneficio. Aun cuando hayan cambiado los nombres, la forma revive con nuevos actores. La gran duda es si quien salió beneficiada fue la democracia —y la genuina movilización ciudadana—, o simplemente la maquinaria de un partido cuyo músculo, al menos por hoy, parece depender de autobuses llenos de gente.