Cambio trascendente acabar privilegios y mochadas en la Obra Pública en Cajeme
Por Alejandro de la Torre D. /CRóNICA10
El área de desarrollo urbano municipal también requiere una clara restructuración.
Los recursos destinados a Obra Pública deben tener una trascendente modificación en la metodología de aplicación, licitación y beneficio.
En Cajeme media docena de grandes y capitalizadas empresas de construcción son las ganonas en los últimos 18 años del 80% de las obras de pavimentación, alrededor de $300 millones anuales.
Podemos referirnos en Cajeme a las beneficiarias de siempre: Tekton, ICSA, Terplan, Faly, Garpe. Se llevan licitaciones cotizadas en 20 hasta 50 millones de pesos ahora con la modalidad de concreto hidráulico.
Cada vez tienen mayor cantidad y fuerza en maquinaria en detrimento de medias y pequeñas constructoras. Ahí hay velada corrupción, oscuras mochadas.
De la misma forma un cambio trascendente es que deben regresar al Ayuntamiento por ejemplo en Cajeme, más de $250 millones que a partir de 2015 los recondujeron indebidamente a la SIDUE estatal.
Un proyecto de desarrollo de cambio verdadero es acabar con ese acaparamiento de la obra, y fortalecer empresas de los trabajadores de la construcción para que hagan por lo menos la quinta parte de la obra publica en 2019 y la mitad en 2020, un acto de justicia.
El área sur de la ciudad y el área urbana popular deben mejorar radicalmente sus vialidades y las calles de los pueblos.
El ayuntamiento igualmente debe adquirir maquinaria para hacer calles como hace mas de 40 años reduciendo hasta en un 100% los costos y los tiempos.
Un reto de transformación y no de continuar con lo mismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario