Efe efe en el DF
Por
Alejandro de la Torre
Cinco
millones y medio de pesos obtendrá el diputado federal Faustino Félix Chávez
por tres años de ir y venir más de cuatro veces al mes en vuelo aéreo al
palacio de San Lázaro en la ciudad de México.
Este
gasto publico que va a parar desde luego a los emolumentos ganados por el nieto
del exgobernador de Sonora ¿Tienen en resultados un beneficio correspondiente
para los ciudadanos del distrito electoral numero 06 al que pertenece el
municipio de Cajeme?
¿Es
cierto que la reforma energética dirigida por Beltrones y Peña Nieto va a bajar
el precio de las gasolinas, del gas domestico y de la luz? ¿Cuándo?
¿Es
real que la construcción del ducto para distribuir gas natural hará que baje el
precio que cuesta pagar por el consumo doméstico e industrial de electricidad?
El
diputado dice que si, que en unos años mas, habrá crecimiento, mayor empleo y
que mejoraran los salarios gracias a las reformas estructurales. Pero no dice
cuantos años. ¿El 2016, 2018 o el 2021?
Pero
Faustino Félix ¿Es verdad que tuvo una participación destacada en la cámara de
diputados en estos dos años que desquitó su dieta y percepciones de tantos
millones de pesos que engrosaron sus cuentas bancarias? Tal vez compró una
nueva Cheyenne Harley Davidson de lujo que conducía cuando se desempeñaba de
regidor hace 10 años.
Tal
vez se compró una residencia vacacional en Rocky Point u otro yate más grande
con el que se retira a altamar en San Carlos.
Heredero
de gran cantidad de terrenos urbanos en Ciudad Obregón, el también dueño de
Tribuna quiere ser alcalde pero no ha hecho nada por el pueblo de Cajeme mas
que burlarlo.
Notorio
es el incremento publicitario que recibió del gobierno municipal priista actual
para influir en la opinión ciudadana y manejar la información bajo los
intereses de Félix Escalante y Félix Bours.
Tribuna
recibe una jugosa partida presupuestal del empobrecido municipio de Cajeme
mayor a los dos millones de pesos anuales superior dos veces al convenio publicitario
que tenia con el ayuntamiento de Manolo Barro. Quizás la excusa sea que el último
año que recibió publicidad del gobierno estatal fue en 2010, enseguida vendría la
disputa del acueducto.
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