lunes, 30 de marzo de 2020

Constellation Brands en la cuerda floja en Cajeme

CONSTELLATION EN CAJEME.
Por Alejandro de la Torre D./CRóNICA10
Estuve hace semanas en la construcción de la planta de cerveza a un costado de lo que fue la planta Corona, vi en el lugar más de cien trabajadores que laboran desde principios de 2019, con salarios de 5 a 8 mil pesos, contratados para ensamblar vigas, plafones, grandes paredes metálicas, asbesto y modulos preconstruídos, mallas, losas de concreto, techos tubulares, tuberías y silos, grandes depositos de liquido, canales, calles, alambradas.
Toda la construcción dicen que es de lo más avanzado en tecnología, de enorme costo.
Vi que los principales proveedores, que traen sus logotipos en carros y automóviles, uniformes y cascos, son constructoras foráneas que vienen de Durango, Monterrey o de Guanajuato.
Aquella fábrica cervecera antigua de hace cuarenta años, que tenía una torre de unos 10 metros de alta precisamente con una Corona luminosa de amarillo y rojo era simbólica de la industrialización local.
La empresa era mexicana, producía millones de litros de cerveza y compraba cebada maltera cosechada en la región o de los alrededores, le daba empleo a mil trabajadores y tenía buenos sueldos por que la economía del país era buena, todavía no le pegaba el salvaje neoliberalismo en ciernes.
El sabor de la cerveza era magnífico, Pacífico, Corona, Modelo, era la Cervecería Modelo del Noroeste comprada por Pablo Diez Fernandez.
Los sucesores de este empresario regiomontano se la vendieron a la empresa Anehuser Busch en 20 mil 100 millones de dólares, y luego hicieron un consorcio trasnacional llamado Constellation Brands Inc.
CB Inc. es una empresa multinacional que compite con Heineken, por el mercado norteamericano, europeo y asiático, sus ventas son de billones de dólares y logró con la anuencia o sugestión al gobierno y a los funcionarios del Distrito de Riego poner a su disposición la mejor agua del mundo, que es la de Río Yaqui, y que si se frustran sus planes en Mexicali lo más probable es que quiera expandir su fábrica en Cajeme.
Y que gobernantes o detentadores del agua de riego agrícola piensen ofertarle más de 100 millones de metros cúbicos para fabricar cerveza, es no tener madre.
Por ello, este Diputado Federal de apellido Russo, que pide que se traigan el dinero de la planta a Cd. Obregón, es una jalada de pelos, que debemos de decirle con todas sus letras, que solo la aceptaremos si se hace una consulta popular también para Cajeme que nos lo mandate por que el dueño del agua no es el distrito de riego, no es el cacicazgo local de agrotitanes, no es ni siquiera la Conagua, es el pueblo de Cajeme y el pueblo del valle del yaqui.


No hay comentarios:

Publicar un comentario