Empleadas domesticas ganan menos de 5 mil pesos y sin IMSS

Castigados derechos de trabajadoras domésticas en Obregón 

Empleadas que trabajan en el servicio doméstico, celebran la posibilidad de acceder a los servicios médicos y seguros. Ven el hecho como un avance de reconocer su trabajo y se les den prestaciones.

 Por Javier Zepeda

Ciudad Obregón, Sonora.- La señora Guadalupe Monreal tiene más de 12 años dedicándose a limpiar casas, es experta en manchas, conoce casi todas las marcas de detergentes y es igual de buena aseando el interior que el patio. Aunque le ha tocado vivir todo tipo de situaciones en su trabajo, jamás ha tenido seguridad médica como ahora puede obtenerla gracias al beneficio de la reforma aprobada por la Cámara de Diputados.

Esta nueva disposición obliga a los patrones a la afiliación de sus empleadas al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), obligando a ofrecer los servicios de consultas médicas y recibir medicamentos, pero además tendrán derecho a los cinco seguros que prevé la Ley del Seguro Social (LSS), entre ellos el seguro por enfermedad y el de retiro.

Se estima que en México hay alrededor de 2.5 millones de personas dedicadas a este rubro, de las cuales 96 por ciento trabaja sin contrato y 69.5 por ciento sin prestaciones, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

·         Desconocimiento

Aunque todo lo anterior parece perfecto, uno de los principales problemas es el desconocimiento de las trabajadoras del hogar sobre la reforma aprobada, poco saben de este nuevo derecho que tendrán. “Llevo ya poco más de 12 años y sin seguro social, es realmente una gran noticia para mí aunque la verdad desconozco mucho del tema”, confesó Guadalupe a TRIBUNA.

La mujer mencionó que falta mayor difusión sobre el tema para que sus compañeras y los propios patrones se enteren de que tienen que cumplir, sin embargo, ven esta reforma como un paso para “dignificar su empleo”. “Aun así el que se esté considerando o se haya aprobado de que podamos contar con este beneficio, considero, que es un importante avance, ya que cuando de la salud se trata es un gran alivio para cualquier trabajador poder atenderse y que el patrón vea por su bienestar”, comentó.

Obviamente lo considero muy bueno, pienso que es algo que se debió de implementar durante años atrás, pero ahora finalmente vemos este progreso. Sabemos que se ha visto siempre como un trabajo informal, pero todos tenemos derecho a estar asegurados por cualquier emergencia que podamos tener", aseguró Jennifer, otra de las trabajadoras del hogar entrevistadas por este medio.

La mujer explicó que sus tareas en el hogar de la familia para la que trabaja van desde trapear, barrer y regar el patio, hasta planchar y acomodar la ropa. “Estoy muy agradecida con mis patrones, pero de darme seguro social estaría aún más feliz”. Aun así Jennifer buscará informarse primero del tema porque al igual que Guadalupe no sabe mucho. “De igual forma, si es así (que les den seguro) perfecto, de lo contrario igual necesito seguir realizando mi trabajo, porque mi familia depende de ello”, expresó.

En el caso de Sandra, quien también lleva varios años limpiando casas, dijo tener seguro social por parte de su esposo, pero el tenerlo por su propia cuenta y acceder a más prestaciones sin duda es una muy buena noticia. “En mi caso cuento con seguro por parte de mi esposo, pero claro que el hecho de poder contar con aseguramiento por parte de mi propio trabajo me hace sentir mejor y con mayor comodidad. Solo espero que sea una realidad, que se cumpla con esto y que todas las personas que nos dedicamos a estas actividades podamos gozar de este beneficio que es muy importante, porque la salud es primero”, precisó.

·         Vacíos legales

Diversos expertos que han analizado el decreto de reforma apuntan a que hay ciertas partes donde se necesitaría mayor claridad, por poner un ejemplo mencionan que no especifica un salario base para la cotización de las trabajadoras del hogar.

Además los abogados expertos en litigios en materia laboral explican que a diferencia de otros trabajos, donde las cuotas del Seguro Social son tripartitas (es decir aportadas por trabajador, empleador y gobierno), en este caso de las trabajadoras de casa, el gobierno no aportará nada.